Resucitado por medio del Espíritu

Resucitado por medio del Espíritu

la-verdad-para-hoy

1/13/2017

Dios no da el Espíritu por medida. El Padre ama al Hijo, y todas las cosas ha entregado en su mano. (Juan 3:34-35)

alimentemos_el_almaJesucristo desempeñó una función que exigía sumisión voluntaria, e hizo la voluntad del Padre mediante el poder del Espíritu. Ese es un acto asombroso de amor y humildad de alguien que es plenamente Dios y que siempre lo será por toda la eternidad.

Es importante reconocer la obra del Espíritu en el ministerio y la resurrección de Jesús porque ella indica que toda la Trinidad participó en la redención de la humanidad. La mayor confirmación de que Jesucristo es quien dijo ser es que el Padre resucitó al Hijo mediante el poder del Espíritu Santo.

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Palabras de consuelo

13 Enero 2017

Palabras de consuelo
por Charles R. Swindoll

Job 3:1-26

alimentemos_el_almaEn los primeros años de la década de los 60, cuando un cristiano sufría una depresión como la de Job lo reconocía con sinceridad, nunca lo decía públicamente. Se tragaba su sufrimiento. El primer libro que leí sobre este tema, que trataba de los trastornos emocionales y de la enfermedad mental entre los cristianos, fue considerado herético por la mayoría de mis hermanos evangélicos.

La opinión reinante en ese tiempo era sencilla: los cristianos no tenían colapsos emocionales. Además, ¡usted siempre se recuperaba rápidamente de una depresión!

¿Sabe usted qué palabra se utilizaba en la primera mitad de la década de los años 60 para referirse a los que luchaban con una depresión profunda? Nervioso. “Tiene un problema nervioso”. O, simplemente: “Ella está nerviosa”. Si usted, Dios no lo quisiera, tenía que ser hospitalizado por su trastorno “nervioso”, no había una palabra cristiana que pudiera definir eso. Repito: usted no se lo contaba a nadie. Debía darle mucha vergüenza el no confiar en el Señor en medio de su lucha ni descansar en su fidelidad para “sacarle” de su depresión.

Recuerdo al profesor de un seminario, que nos hablaba en cuanto a la ayuda que podíamos dar a las familias cuando había que oficiar un funeral. Si la persona se había suicidado y había sido creyente, nunca debíamos hablar de ese hecho. Francamente eso no sonaba correcto entonces, ni tampoco suena correcto hoy. ¡El consejo basado en los sentimientos de culpa nunca suena correcto porque no es correcto! Y eso que yo no estaba bien enterado entonces de que Job capítulo 3 se había escrito. De haberlo sabido, le habría dicho al profesor: “Oiga, ¿y qué me dice de Job?”.

Quiero escribir esto para los que están leyendo estas palabras, y que puedan estar en el foso, luchando por volver a la normalidad. Es posible que las cosas se les hayan vuelto tan sombrías que estén necesitando la ayuda de un psicólogo (o un psiquiatra) cristiano competente para que le ayude a orientarse. Lo más inteligente que pueden hacer es encontrar uno y visitarlo. En realidad, vaya hasta donde tenga que ir. Pero asegúrese de que el consejero conozca realmente al Señor Jesucristo y que sea de verdad competente, capaz de darle la dirección que necesita, para que usted pueda batallar con su maraña de sufrimiento. Y añadiría algo más: “Que el Señor le bendiga por cada hora que pase tratando de salir del hoyo donde ha estado. Tenga esperanza. Nuestro fiel Dios le sacará adelante”.

Tomado del libro Buenos Días con Buenos Amigos (El Paso: Editorial Mundo Hispano, 2007). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmundohispano.org). Copyright © 2017 por Charles R. Swindoll Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.

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El último rey-sacerdote,

Por Amor a Dios

Un devocional para apasionarnos por la Palabra

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13 ENERO

Génesis 14 | Mateo 13 | Nehemías 3 | Hechos 13

alimentemos_el_almaSi leyéramos el libro de Génesis sin conocer el contenido de ningún otro libro de la Biblia una de las secciones que encontraríamos más enigmáticas sería estos versículos que tratan de Melquisedec (Génesis 14:18–20). ¿Cómo puede ser que contribuya de forma sustancial a la línea narrativa del libro?

Aparece tras la decisión (Génesis 13) de Abram y de Lot de separarse para poner fin a las querellas que se sucedían entre sus respectivos empleados. Lot escoge las llanuras de Sodoma y Gomorra. Esto quiere decir que tanto él mismo como su familia y sus bienes son capturados cuando Quedorlaomer y los reyes más bien mediocres que se han aliado con él atacan las ciudades gemelas y se hacen con un botín considerable. Abram y un buen número de guerreros persiguen a los saqueadores. La batalla acaba con la liberación de Lot y de su familia, y la restauración tanto de las personas como de los bienes que habían sido saqueados. En los versículos siguientes, Abram rechaza cualquier recompensa de parte del rey de Sodoma, una ciudad cuya maldad ya era notoria, pero acepta con agrado la bendición del rey de Salem (posiblemente la misma ciudad que Jerusalén) y a cambio le ofrece un diezmo honorífico.

Históricamente, Melquisedec (nombre que significa “rey de justicia”) parece ser el rey de la ciudad-Estado de Salem (nombre que significa “paz” o “bienestar”. Su rol en la narrativa no es sólo el del “Rey de Salem”, sino también “sacerdote del Dios altísimo” (14:18). De hecho, bendice a Abram en nombre del Dios Todopoderoso. Hasta tal punto Abram le respeta, aparentemente conociéndole ya por otros encuentros anteriores, que él a su vez también le honora.

No hay motivo para creer que Abram fuese la única persona en la tierra que conservase el conocimiento del Dios viviente. Melquisedec era otro, y Abram reconoce en él un alma gemela. En un libro que cataloga con detalle la genealogía de prácticamente todo el mundo que tiene un lugar en la narrativa, no deja de sorprender la manera como Melquisedec aparece y desaparece – no se nos dice ni quiénes eran sus padres ni como murió. Él y su ciudad son la contrapartida de Sodoma y su rey. Otra vez más, se contraponen la ciudad de Dios y la de los hombres (como diría Agustín).

Melquisedec sólo se menciona en dos sitios más en la Biblia. El primero, es el Salmo 110 (ver la reflexión para el 17 de junio); el otro es Hebreos, donde el escritor reconoce la importancia de la inclusión de Melquisedec en la línea narrativa de Génesis, afirmando que se trata de un evento cargado de simbolismo cuyo significado es extraordinario (ver especialmente Hebreos 7). Dios prepara así el camino para el último rey-sacerdote, no sólo a través de profecías verbales, sino también, mediante modelos (o tipos) que establecen las categorías y configuran las expectativas del pueblo de Dios.

Carson, D. A. (2013). Por amor a Dios: Devocional para apasionarnos por la Palabra. (R. Marshall, G. Muñoz, & L. Viegas, Trads.) (1a edición, Vol. I, p. 13). Barcelona: Publicaciones Andamio.

La oración de un soldado

La Buena Semilla

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(Jesús dijo:) Al que a mí viene, no le echo fuera.

Juan 6:37

Esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.

Juan 6:39

La oración de un soldado

alimentemos_el_almaEn 1972, un periódico clandestino de la Samizdat*, en la URSS, publicó el texto de una oración que había sido encontrada en el bolsillo de un soldado ruso, Alexander Zatzepta. La había escrito durante la segunda guerra mundial, momentos antes de una batalla en la que perdió la vida.

«¡Oh, Dios, escúchame! Nunca en mi vida te había hablado, pero hoy siento la necesidad de adorarte. Sabes que desde mi infancia se me dijo siempre que no existías, y yo, como un estúpido, lo creí. Nunca admiré tus grandes obras, ¡pero esta noche elevé la mirada desde una trinchera hasta el cielo lleno de estrellas! Y fascinado por su brillante magnificencia, de repente comprendí qué terrible es el engaño…

Dios, no sé si me tenderás la mano, pero te digo esto, y sé que me entiendes. ¿No es extraño que en medio de un terrible infierno se me apareciese la luz y que te haya descubierto? Simplemente estoy contento por haberte conocido.

A medianoche tenemos que atacar, pero no tengo temor, pues sé que velas por nosotros. ¡Es la señal, tengo que irme! Fue maravilloso estar contigo. También quiero decirte, y tú lo sabes, que la batalla será difícil: es posible que esta misma noche venga a llamar a tu puerta… Pero, ¿qué pasa? ¿Acaso estoy llorando? Mi Señor Dios, tú sabes qué sucedió: solo ahora he empezado a ver claramente».

*) Samizdat: Palabra rusa que significa: «copia y distribución clandestina de literatura prohibida por el Estado».

1 Samuel 10 – Mateo 9:18-38 – Salmo 9:1-10 – Proverbios 3:11-12