¿Algo está mal cuando las mujeres cristianas luchan por un lugar en las plataformas y conferencias, más que disfrutar de su hogar al lado de su esposo e hijos? | Karla de Fernández

Me atrevo a decirlo así, porque, cuando disfrutas de tu hogar, lo último que quieres es estar hablando a mujeres y hombres desde un escenari
La Biblia nos habla y enseña a vivir en familia, en comunidad, compartiendo unos con otros en nuestra iglesia local.
Si tienes la oportunidad de en algún momento compartir con muchas mujeres a través de un taller o una conferencia, gloria a Dios, Dios te use y sea glorificado. No estoy peleada con eso.
Solo te animaría a ver a tu alrededor, tu casa, tu familia, tu iglesia local. Seguramente podrás ayudar más ahí, ¿por qué estás en el lugar donde estás? Porque todos los miembros del cuerpo se ayudan entre sí, juntos (Ef. 4).
Quizás seas el único miembro sano que Dios usará para traer convicción a la vida de una persona más, y esa persona a otra más y a otra más ¡Qué glorioso!
Así, juntos, será más sencillo ser luminares en un lugar donde quizá la luz del evangelio no les ha resplandecido.
No busquemos plataformas, mujer, usemos los dones y talentos que Dios nos ha dado para impactar en el hogar a los hijos que en un futuro serán quienes hablen el evangelio.
No menospreciemos ese lugar glorioso que Dios nos ha dado en el hogar, por querer explotar esos dones y talentos en buscar la fama temporal y banal que trae un escenario.
Cuida y guarda tu corazón. Cualquiera puede suplirte en un escenario, pero nadie puede hacerlo en tu hogar.
🌷«No les tengan miedo. Acuérdense del Señor, que es grande y temible, y luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus mujeres y sus casas».
(Neh. 4:14 NBLA).
¡Luchemos por más familias fuertes! Esa es la prioridad.
Caminemos uno al lado del otro, conociéndonos, siendo íntegros, hospitalarios, amando al de al lado; esto conlleva tiempo, esfuerzo y mucho amor por las almas de aquellos por quien Cristo también murió.
Dios nos ayude y guíe a edificar hogares sólidos, familias fuertes que luchen por más familias fortalecidas en el Señor.
Karla de Fernández está casada con Jorge Carlos y es madre de tres varones. Con su esposo radican en Querétaro, México, donde son miembros de la iglesia A Su Imagen. Es autora de Hogar bajo Su gracia, El azul es para los niños, El temor y nuestra sed de aprobación, Una mujer elegida y Femenina, no feminista. Puedes encontrarla en YouTube, Instagram, Facebook y Twitter.