EJERCITEMOS LA FE

Octubre 16

EJERCITEMOS LA FE

Por fe andamos, no por vista.

2 Corintios 5:7

Thomas Manton dijo que, mientras todo está en calma y hay comodidad, vivimos por los sentidos y no por la fe. Pero nunca se conoce el valor de un soldado en tiempos de paz. Siempre es un reto mantenerse debidamente concentrado a través de una prueba difícil. Aun con la promesa de lecciones aprendidas y recompensas comprendidas, la certeza de esos beneficios puede parecer más teórica que real. Pero podemos tener una confianza mucho mayor en la realidad de todas esas cosas si sencillamente recordamos las palabras del versículo de hoy.

Uno de los propósitos de Dios en las pruebas es darnos mayor fortaleza. Cuando se pasa por una prueba, se ejercitan los músculos espirituales (la fe) y se fortalecen para la próxima prueba. Eso quiere decir que podemos enfrentarnos a peores enemigos y resistir mayores obstáculos, llegando a ser así más útiles al Señor. Y cuánto más útil usted sea, tanto más cumplirá su voluntad en el poder de su Espíritu para su gloria.

Del libro La Verdad para Hoy de John MacArthur DERECHOS DE AUTOR © 2001 Utilizado con permiso de Editorial Portavoz, www.portavoz.com

Usted podrá reproducir este contenido de Gracia a Vosotros sin fines comerciales de acuerdo con la política de Derechos de Autor de Gracia a Vosotros. Disponible sobre el Internet en: www.gracia.org

El dolor, la oración y la soberanía de Dios… todos inescrutables 

El dolor, la oración y la soberanía de Dios… todos inescrutables

Pastor Miguel Núñez

 

El Dr. Miguel Núñez sirve como Pastor Titular de la Iglesia Bautista Internacional en Santo Domingo y es el presidente y fundador del Ministerio Integridad & Sabiduría, que tiene como visión impactar la generación de hoy con la revelación de Dios en el mundo hispano-parlante. Tiene una maestría en teología del Southern Baptist School for Theological Studies y un doctorado en ministerio del Southern Baptist Theological Seminary. El pastor Núñez,forma parte del cuerpo docente del Instituto Bíblico de Integridad & Sabiduría y de la facultad docente del Southern Baptist Theological Seminary. Además es autor de varios libros y contribuidor en varias otras obras.

1 Reyes 19 | 1 Tesalonicenses 2 | Daniel 1 | Salmo 105

16 OCTUBRE

1 Reyes 19 | 1 Tesalonicenses 2 | Daniel 1 | Salmo 105

“El año tercero del reinado del rey Joacim de Judá” (Daniel 1:1) es una estimación según los cálculos babilonios; en Judá, habría sido su cuarto año, es decir, el 605 a.C. La primera ronda de deportaciones ocurrió, pues, en el 605 y habría incluido a Daniel; en la segunda, iban Ezequiel, Joacim, la reina madre, la aristocracia y los artesanos cualificados, y sucedió en el 597. La definitiva y asoladora destrucción de Jerusalén aconteció en el 587.

Casi veinte años antes de que esto tuviera lugar, un número de jóvenes judíos de la aristocracia habían sido llevados a Babilonia. Según Daniel 1, los trataron muy bien. La política imperial no solo era generosa, sino inteligente. El imperio apartaba a estos jóvenes de talento y buenos modales y les proporcionaba la mejor educación y formación social del mundo, con una serie de prerrequisitos para que el futuro fuera aún más agradable. A su debido tiempo, entrarían al servicio del gobierno y serían intensamente leales a sus benefactores, mientras que contribuirían con su juventud, sus aptitudes y su conocimiento de las fronteras imperiales. Los cuatro jóvenes hebreos aquí mencionados llegarían a ser tan babilonios en su apariencia que se olvidarían hasta del nombre recibido al nacer: Daniel sería Beltsasar; Ananías sería Sadrac, etc.

Pero Daniel hizo una raya en el agua. Le podía haber costado la vida. No objetó en contra del cambio de su nombre ni en el servicio real para el imperio babilonio. Pero no se “contaminaría” (1:8) comiendo alimentos preparados en las cocinas reales. Sabía que, si participaba de ellos, casi con toda seguridad comería de vez en cuando lo que la ley de Dios prohibía estrictamente. Para él, era un asunto de obediencia y de conciencia. En la providencia de Dios, el jefe ante quien era responsable, Aspenaz, era comprensivo y el resultado se recoge en este capítulo.

Muchos de nosotros pensaríamos hoy que la postura de Daniel era vagamente quijotesca, pero desde luego no es algo que imitaríamos. ¿Por qué morir por culpa de unas salchichas? Piensa un poco en ello; ¿hay algo por lo que merezca la pena morir? Es probable que no, si la vida solo consiste en lo que ocurre durante nuestro breve periplo terrenal y lo único que importa es lo que me sucede a mí. Pero el objetivo de Daniel era complacer a Dios y ceñirse al pacto. Babilonia no podía poner una trampa a sus valores; a este respecto, estaba dispuesto a morir. El problema es que, cuando una cultura se queda sin cosas por las que morir, tampoco tiene ya ninguna por la que vivir. Un colega en el ministerio (el Dr. Roy Clements) ha dicho con frecuencia: “Somos mártires potenciales o potenciales suicidas; no veo término medio alguno entre ambas cosas. Y la Biblia insiste en que todo creyente en el Dios verdadero tiene que ser un mártir potencial”.

Carson, D. A. (2014). Por amor a Dios: Devocional para apasionarnos por la Palabra. (L. Viegas, Trad.) (1a edición, Vol. II, p. 289). Barcelona: Publicaciones Andamio.

OPOSICIÓN VOLUNTARIA

OPOSICIÓN VOLUNTARIA

Charles R. Swindoll

16 de octubre, 2018

Proverbios 1

De los tres distintos tipos de rebeldes —aquellas personas que se oponen a la dirección y a la instrucción interna de Dios los ingenuos llevan la menor culpa moral. Uno espera que un niño sea ingenuo, pero se le va dando más responsabilidad conforme va creciendo. No obstante, no aprender de la vida es menos pecaminoso que aquellos que se burlan de la dirección de Dios. La Biblia reserva la reprensión más severa para esta clase de oposición.

El burlador 
Esta persona es muy diferente de una persona ingenua. El burlador se deleita en la burla. El término hebreo es lutz y significa «hacer mofa» o simplemente «burlarse». Expresa la idea de rechazar con una actitud de desprecio. Los burladores desprecian y sienten disgusto por Dios o cualquier otra verdad espiritual que se le asemeje. Es normal que nuestra reacción inicial sea confrontarlos para que dejen la burla y comiencen a pensar sabiamente. No obstante, confrontar al burlador, por lo general, es un desperdicio de tiempo, tal como Salomón lo menciona:

El que corrige al burlador se acarrea vergüenza, y el que reprende al impío se acarrea afrenta. No reprendas al burlador porque te aborrecerá; corrige al sabio y te amará (Proverbios 9:7,8).

Este pasaje explica por qué caen bajo la categorización general de oposición. El burlador no escucha ninguna palabra de corrección. Se opone a ella vigorosamente, no porque no crea en Dios. Él cree en Dios, pero se burla de Dios porque rehúsa reconocer su soberanía. Este rasgo de carácter rechaza toda sumisión a cualquier autoridad y afecta cualquier relación que tenga.

El hijo sabio acepta la disciplina de su padre, pero el burlador no escucha la corrección (Proverbios 13:l).

Echa fuera al burlador y se evitará la contienda; también cesarán el pleito y la afrenta (Proverbios 22:10).

La intención del insensato es pecado, y el burlador es abominación a los hombres (Proverbios 24:9).

Reflexión: ¿Conoce a un burlador? ¿Alguien que se burla de Dios, que denigra su pueblo y que rechaza la verdad espiritual? ¿Cuál ha sido su reacción en el pasado? ¿De qué forma esto cambia su perspectiva del burlador y su relación con él? ¿De qué forma esos proverbios impactan la reacción que tendrá en el futuro?

«No aprender de la vida es menos pecaminoso que aquellos que se burlan de la dirección de Dios.»

Charles R. Swindoll

Adaptado del libro, Viviendo los Proverbios  (Editorial Mundo Hispano, 2014). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmundohispano.org). Copyright © 2018 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.

Disponible sobre el Internet en: https://visionparavivir.org/

Solo con permiso

Martes 16 Octubre

Dios… aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job… y bendijo el Señor el postrer estado de Job más que el primero.

Job 42:10-12

Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.

Santiago 5:11

Solo con permiso

El principio del libro de Job nos muestra a Satanás entre los ángeles, y Dios le habla sobre la ejemplar conducta de Job. Satanás argumenta diciendo que si Job honra a Dios es porque lo tiene todo: hijos, riquezas… Dios le responde: “He aquí, todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él” (Job 1:12). Entonces en un día perdió a sus diez hijos y todos sus bienes. Sin embargo siguió siendo recto en medio de la prueba.

Satanás, pues, dijo que Job seguía siendo íntegro porque su salud no había sido tocada. Dios respondió: “He aquí, él está en tu mano; mas guarda su vida”. Y Satanás hirió a Job con una enfermedad muy dolorosa (cap. 2:7), a tal punto que deseaba morir.

Estos capítulos nos descubren un mundo invisible. Nos revelan que Satanás, el enemigo de los hombres, y sobre todo de los creyentes, tiene acceso a Dios. Se esfuerza todo lo que puede para hacer daño, y dispone de un poder terrorífico. Sin embargo, notemos que:

–No es Satanás quien toma la iniciativa del diálogo, sino Dios.

–Cuando Dios permite que Satanás tenga cierto poder sobre Job, le fija límites precisos.

–La prueba de Job finaliza con una inmensa bendición. Esto es lo que Dios tenía en vista desde el principio. ¡Sin saberlo, Satanás actuó a favor de Job!

Hijos de Dios, no temamos, Dios es nuestro Padre, nos ama, y Satanás solo puede actuar con su permiso, para nuestro bien final.

Deuteronomio 10 – Juan 6:41-71 – Salmo 118:5-9 – Proverbios 25:14-15

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)
ediciones-biblicas.ch – labuena@semilla.ch