El servicio como adoración

Enero 22

El servicio como adoración

Que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. (Romanos 12:1)

Cuando muchos piensan en la adoración, se imaginan los vitrales de una iglesia y los inmensos órganos. Pero en la Biblia, la misma palabra que se emplea para describir la adoración también significa servicio.

La mayor adoración que puede rendírsele a Dios es servirle. Para Pablo, el servicio significaba una entrega absoluta.

Pablo le escribió a Timoteo: “Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia” (2 Ti. 1:3). Pablo estaba diciendo que se podía mirar en lo más íntimo de su ser y ver que servía a Dios con todo su ser. El servicio de Pablo era un acto de adoración. Era profundo, genuino y sincero. Esa es la verdadera medida de la genuina espiritualidad. La única forma de servir a Dios es con una entrega absoluta.

Del libro La Verdad para Hoy de John MacArthur DERECHOS DE AUTOR © 2001 Utilizado con permiso de Editorial Portavoz, www.portavoz.com

Usted podrá reproducir este contenido de Gracia a Vosotros sin fines comerciales de acuerdo con la política de Derechos de Autor de Gracia a Vosotros. Disponible sobre el Internet en: www.gracia.org

Gozo de creer, gozo de amar

Martes 22 Enero

Por la fe entendemos.

Hebreos 11:3

Que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

1 Corintios 2:5

Gozo de creer, gozo de amar

La cultura occidental actual propone una visión de la vida, del pensamiento y de la moral en la cual no hay mucho lugar para todo lo que nos supera. Se dice que todo está bajo el control y el juicio de la razón humana, y también de una libertad individual absoluta.

Sin embargo, no pensemos que la razón y la libertad están en contradicción con la fe cristiana. Al contrario, la fe nos abre perspectivas nuevas sobre el sentido de la vida; solo ella puede liberarnos de lo que nos esclaviza. Ella nos hace descubrir que no vivimos en un universo cerrado, sino que hay alguien que nos sobrepasa absolutamente, que hay un Dios. “Mayor es Dios que el hombre”. “Dios es grande, pero no desestima a nadie” (Job 33:12; Job 36:5).

La fe no es el resultado de nuestros esfuerzos personales. Es la respuesta libre y feliz al llamado de Dios. “Dios… quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad” (1 Timoteo 2:3-4). Tal vez usted está indeciso respecto a la fe cristiana, quizá tenga muchas preguntas… Llévelas en oración a Dios, pídale que le responda.

Escuchar y recibir la Palabra de Dios hace nacer y fortalecer la fe. Dios viene a nosotros cuando leemos la Biblia, pero él no se impone. La fe nace de un encuentro personal con Dios y crea una relación nueva y feliz. Y esta relación nos lleva a buscar el contacto con otros creyentes. La fe supone participación, fraternidad, gozo de creer, gozo de amar a Dios y en consecuencia al prójimo.

1 Samuel 17:31-58 – Mateo 14:13-36 – Salmo 15 – Proverbios 4:10-13

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)
ediciones-biblicas.ch – labuena@semilla.ch