Fé es…la evidencia de las cosas que no se ven. Hebreos 11:1

Manantiales en el Desierto

Abril 24

Lettie B. Cowman
«Fé es…la evidencia de las cosas que no se ven.»
(Hebreos 11:1, Versión Inglesa.)
La fé verdadera coloca su carta en el buzón del correo y la deja que marche. La desconfianza se detiene y duda si ha de recibir respuesta alguna. Tengo en mi mesa varias cartas que escribí hace algunas semanas; pero a causa de cierta duda sobre la dirección o el contenido, aún no las he echado al correo. Ni a mí ni a nadie aún han hecho bien alguno. Nunca harán nada hasta que me desprenda de ellas y las confíe al cartero y al correo.
Esta es la forma como actúa la fé verdadera. Envía su caso a Dios, y entonces El obra. En el Salmo treinta y siete hay un magnífico versículo que dice: «Encomienda a Jehová tu camino, y espera en Él; y Él hará.» Pero Él nunca obra hasta que nosotros encomendamos. La fé es un recibir, o mejor dicho, un tomar de los dones ofrecidos por Dios. Podemos creer, venir y encomendar, pero no nos daremos cuenta por completo de toda nuestra bendición hasta que empecemos a recibir y alcancemos la actitud de morar y tomar.-Days of Heaven upon Earth.

El Dr. Payson cuando joven, escribió de la forma siguiente a una madre anciana que estaba muy apesadumbrada a causa del estado de su hijo: «Usted se impacienta y sufre demasiado acerca de él. Una vez que usted ha orado por él, como ya lo ha hecho, y lo ha encomendado a Dios, ¿no debiera de cesar su inquietud acerca de él? El mandamiento, ‘No estéis afanosos por nada,’ no tiene límites; y lo mismo puede decirse de la expresión, ‘Echando toda vuestra solicitud en ÉL’ ¿Si arrojamos nuestras cargas sobre otro, pueden continuar oprimiéndonos? Con respecto a mí mismo, yo he hecho esta prueba en mis oraciones; Si después de haber encomendado alguna cosa a Dios, puedo permanecer lo mismo que Hannah sin dolores de cabeza y sin inquietarme, sin sufrir dolores de corazón, entonces considero esto como una prueba de que he orado con fé; pero si continúo con la misma carga y pesar, entonces pienso que no he ejercitado mi fé.»

Dios no comete errores

Lunes 24 Abril

Gustad, y ved que es bueno el Señor; dichoso el hombre que confía en él.

Salmo 34:8

Dios no comete errores

Cierto día el rey de una tribu africana fue atacado por un tigre; y aunque perdió un dedo, logró salvar su vida gracias a la intervención de uno de sus esclavos. Entonces el rey, lleno de ira, gritó: «Si Dios fuese bueno, yo no hubiese perdido mi dedo». El esclavo, que era cristiano, le respondió: «Majestad, Dios es bueno, y lo que hace es sabio. ¡Él nunca comete errores!». Al oír estas palabras, el soberano se enfureció aún más e hizo encarcelar al esclavo que acababa de salvarle la vida.

Tiempo después el rey fue capturado por unos guerreros que tenían la costumbre de ofrecer sacrificios humanos a sus ídolos. Cuando lo iban a sacrificar, sus enemigos notaron que le faltaba un dedo, y debido a eso lo soltaron rápidamente, pues no estaba permitido sacrificar a una víctima que tuviese un defecto corporal.

Cuando volvió a su casa, el rey ordenó liberar a su esclavo, y le dijo con bondad:

–Dios fue realmente bueno conmigo. Me iban a matar, pero como me faltaba un dedo, me dejaron ir. Ahora me pregunto por qué Dios permitió que te encerrase.

–Majestad, respondió el esclavo, si no hubiese estado en la cárcel, también me hubiesen capturado y me hubiesen matado, pues yo tengo todos los dedos.

A menudo no comprendemos los propósitos de Dios en las situaciones que vivimos, pero siempre debemos estar seguros que “a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien” (Romanos 8:28).

“Y en gran manera se maravillaban, diciendo: bien lo ha hecho todo” (Marcos 7:37).

Ezequiel 46 – Marcos 1:1-20 – Salmo 48:1-8 – Proverbios 14:11-12

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