Consejos de una madre puritana

Estos extractos son tomados del diario de Elizabeth Jollie, la esposa del reverendo Timothy Jollie, quien fue el ministro de la congregación no conformista en Sheffield desde 1681 hasta 1714.

La señora Jollie era la hija del reverendo James Fisher, el pastor expulsado de Sheffield que murió en 1666 cuando Elizabeth tenía 19 años de edad. Habiendo predicado aceptablemente por un año a la congregación de New Hall, Timothy Jollie fue ordenado en el ministerio en abril de 1681 y poco después, el 2 de julio, él y Elizabeth Fisher estaban casados. El diario de Elizabeth muestra que ella no era una mujer común ya que, aunque no era robusta físicamente, poseía un carácter y fe puritanos y era ayudante de su esposo en su familia, la iglesia y la academia Attercliffe. Su carácter pronto fue puesto a prueba, ya que en 1682 Timothy Jollie fue forzado a irse de Sheffield para escapar de ser arrestado debido al Acta de las Cinco Millas de Carlos II de Inglaterra.

El diario comienza en 1683 cuando su primera hija Betty tenía cerca de un año. La señora Jollie parece haber tenido temores sobre su propia seguridad y salud, y estaba ansiosa por dejar constancia de las persecuciones que sufría su esposo, así como por guardar consejos espirituales maternos para su hija en los años siguientes. Al principio, describe cómo esperaba el nacimiento de Betty en los tiempos del Acta de las Cinco Millas, pero que “agradó al Señor el ordenar que su querido padre viniera a casa y se quedara mientras yo trabajaba de miércoles hasta el día del Señor. Luego de esto, él se quedó conmigo algunas semanas y luego fue forzado a retroceder, e ir de la casa de un amigo a la del otro, y algunas veces venía a casa y luego se iba de nuevo. El 19 de enero de 1683, vino a casa y la noche siguiente fue llevado en una muy violenta manera. No le permitirían hablar conmigo”.

Los siguientes dos años conllevaron encarcelamiento, adversidad y mudanza de una casa a la otra por la familia Jollie. En la incertidumbre de la vida, Elizabeth cuidó a la pequeña e indefensa Betty y escribió palabras de consejo espiritual que ayudarían a la siguiente generación de su familia a mantener la herencia del puritanismo que ella tanto amaba. Ella escribe:

“Y ahora, mi querida hija, te dejo pocas cosas sin saber si viviré para tener la oportunidad de hablarte; concretamente:

  1. En cualquier lugar que el Señor por Su providencia te ponga, asegúrate de que Su honor sea la primera y más grande preocupación. Busca primero el reino de Dios, etc.
  2. Sé diligente en hacer tu tarea tanto como sepas.
  3. Nunca te apresures en moverte a un nuevo lugar y condición. Siempre ora al Señor por dirección y pide el consejo de amigos fieles.
  4. Asegúrate, si alguien te confía algo que debe ser guardado en secreto, de ser fiel o habrás primero deshonrado a Dios; segundo, perdido una buena conciencia; tercero, perdido a tu amigo; y cuarto, dado un mal ejemplo.
  5. Si alguien te ha mostrado benevolencia, no le devuelvas con mal después.
  6. No te inclines a escuchar historias contadas por aquellos con los que vives.
  7. No te apresures en creer todo lo que escuchas sin buenos fundamentos para hacerlo.
  8. No te entrometas innecesariamente en los asuntos de otras personas. Ten cuidado de ser una entrometida.
  9. Ten cuidado de contar historias de otros. El Señor me ha hecho ver el gran mal de esto.
  10. Pruébalos conversando antes de confiar en ellos.
  11. Si vives para ser capaz de dar consejos, asegúrate de evaluar bien el asunto y escuchar las circunstancias antes de dar tu opinión.
  12. Asegúrate de ser cuidadosa de hablar algo de alguien o con alguien de lo que luego tengas que arrepentirte.
  13. Sin importar con quién estés, asegúrate de temer de ti misma. Vigila tus pensamientos, palabras, acciones y ojos.
  14. Pasa mucho tiempo leyendo las Escrituras. Pídele a Dios que te ayude a entenderlas.
  15. Asegúrate de rogar al Señor seriamente que te ayude, que tu conversación tanto hacia Dios como hacia los hombres sea sin culpa e inofensiva, como corresponde al Evangelio”.

Habiendo dado a su hija palabras de consuelo en cuanto al vivir cristiano, la señora Jollie reflexionó, no solo acerca de la incertidumbre de la vida, sino también acerca de las dificultades que Betty podría enfrentar en guardarse. Recordando que todos sus bienes habían sido confiscados y los reducidos medios de los no conformistas en general, le aconseja a Betty cómo conducirse en un empleo:

“Mi querida hija, no sé qué porción de este mundo el Señor te dé, pero si no tienes con qué mantenerte, te aconsejaría, antes que ser de carga a alguno de tus amigos, ir a servir si puedes encontrar un buen lugar.

  1. Asegúrate de ir con una familia creyente y también donde puedas expandir tu conocimiento en relación a los asuntos externos de este mundo, y también donde puedas tener algo con qué suplir tus necesidades.
  2. Asegúrate de aprender tu labor, que nadie tenga motivos para hablar mal de ti.
  3. Sé fiel a tu confianza en palabra y hecho. Si tus pares son infieles, repruébalos y aconséjales hacer su labor. Si no te escucharan, díselo a tu amo o ama. Ten cuidado de no ser parte de su pecado con tu silencio.
  4. Si tus pares te hablaran con palabras delicadas, ten cuidado. Pruébalos antes de confiar en ellos.
  5. Ten cuidado ante cualquier carroza encantada3. Está más atenta que nunca en compañía de hombres. No pongas tentaciones delante de ti de ninguna manera. Si te presentan una tentación, aborrécela y sé más que cuidadosa en cómo te rodeas de su compañía.
  6. Si tienes mucho trabajo, asegúrate de siempre apartar tiempo para tu tiempo con Dios en oración y lectura de las Escrituras. Atiende a la oración familiar y a escuchar la Palabra leída. Colosenses 3. 1 Pedro 2.
  7. Está muy dispuesta a aprender aquellas cosas que quieres entender.
  8. Está dispuesta a que te marquen tus errores y ten cuidado ante cualquier respuesta inapropiada tuya”.

Siendo ella misma la hija del fundador de la Iglesia no conformista en Sheffield, Elizabeth Jollie entendía la importancia de estar ligada a una sociedad “recolectora”. Remarca su experiencia para mostrar que ser un miembro de la congregación New Hall no había sido un procedimiento automático, sino que había implicado un serio ejercicio espiritual. Para ella, el valor del camino de gracia y la participación de la Cena del Señor son claros a medida que continúa con sus consejos:

“Mi querida hija, si el Señor suscitara en tu corazón el deseo de unirte como miembro de alguna comunidad y que entonces participes del bendito mandamiento de la Cena del Señor, asegúrate de que la comunidad esté llamada por, y se haya unido en, el evangelio, y que tenga ordenanzas administradas evangélicamente. Fue mi esfuerzo hacerlo y tanto como el Señor me da entendimiento, me uní a una comunidad que caminó más cerca del evangelio que cualquier otra a la que me podría haber unido.

Aunque debo decir, tuve alta estima de y honré otras comunidades por aquí y allá; sin embargo, pienso que a la que me uní fue la más cercana al camino que Dios nos ha trazado para caminar. Debo decirte que me costó muchas oraciones y lágrimas, y buscar en libros que tocaran ese tema antes que llegara a cualquier base de satisfacción.

  1. Si has encontrado una comunidad en la que te sientes satisfecha con sus buenos fundamentos, asegúrate de estar correctamente calificada de acuerdo al Evangelio para ser miembro de ella antes de unírtele.
  2. Debes ser capaz de dar tal muestra de tu fe que satisfaga a las personas con las que te unas.
  3. Analiza tu deber en lo que debes hacer en tal gran relación, tanto con respecto a Dios, tu alma, y las personas con las que te unes. Debo decir que a mí me costó mucho autoexamen y probar mi corazón, como también pedir consejos de mis amigos. Tuve en ello mucho beneficio y consuelo. Me encontré con grandes pruebas después. Si no hubiese entrado en esa etapa de dificultad, hubiese sido mucho peor para mí. Hay una cosa sobre la que no sería optimista, pero desearía que desarrolles relaciones en la iglesia antes de casarte. Encontré en esto un gran beneficio, ya que tuve mucho que hacer luego. Tengo ahora mucho sobre mí más que nunca”.

A este consejo acerca de la conducta general, trabajo y membresía de la iglesia, la señora Jollie agrega consejos a Betty acerca del matrimonio. Su propio matrimonio feliz hasta su muerte en 1709 había visto tiempos de persecución tanto como de prosperidad, y es un ejemplo elocuente a la verdad de las siguientes palabras:

“Mi querida hija, si el Señor por su providencia te llamara al matrimonio,

  1. Asegúrate de no entrar en esa relación antes de derramar tu caso ante el Señor. Ruega por Su dirección. Puedo decirte desde la experiencia que Su presencia está por sobre todas las comodidades. No te apresures.
  2. Asegúrate de poner tu amor donde Dios ha puesto el Suyo. Ten cuidado del que no es hijo de Dios. Consulta a tu padre. No hagas nada sin Su consejo. Entendí que leer mi deber a menudo me ha ayudado a entenderlo y a inclinarme más a hacerlo. Pero fíjate que está bien no leer desmesuradamente, sino meditar en lo que leímos, asentarlo en la mente y trabajar para entenderlo. Así es como me beneficio más de ello”.

Algunas entradas hasta el año 1696 acerca de las providencias y muertes en la familia siguen a los extractos anteriores, mezclados con exhortación a agradecimiento en oración, y en 1688, “Querida Betty, recuerda la Revolución”.4

Leer un consejo tan santo nos lleva a preguntarnos cómo creció Betty años después. Afortunadamente, tenemos más información de ella del diario de su hermano más joven, Timothy. (Debido a que estaba enferma, se fue a vivir con su familia a Londres y murió allí el 17 de noviembre de 1739, a la edad de 57 años.) Su hermano, Timothy habla de ella en su diario:

“En Su voluntad soberana, el sabio Dios me separó de una muy querida familiar, cuyo ejemplo y habla habían sido muy benéficos para mi familia. Mi querida hermana Elizabeth Jollie sufrió de un desorden asmático por 10 años… Al final, sobrepasó sus fuerzas y ella rindió su alma en las manos del que se la dio el 17 de noviembre. Fue enterrada en Bunhill Fields el 23 de noviembre. Que su ejemplo viva con nosotros. Su devoción no se vio afectada, su religión era uniforme, su conocimiento era considerable y su prudencia, extraordinaria; su carácter inofensivo y obediente se ganó una benevolencia universal”. Betty nunca se casó.

La señora Jollie también escribió un segundo diario acerca de la infancia de su hijo, Timothy, ya mencionado arriba. Fue escrito durante 1706, cuando Timothy tenía 14 años. En el diario, cuenta la liberación providencial de muchas enfermedades infantiles y peligros desde que “eras de 11 días de edad, cuando te ofrecimos en bautismo y tu querido padre te bautizó, y honestamente queremos que puedas responder a Su nombre. Deseamos consagrarte al servicio del Señor para trabajar en Su viña si ese es el llamado con el cual lo honrarás más. Sinceramente deseo que Él incline tu corazón y te haga un fiel obrero para ganar muchas almas para Jesucristo”. Ese deseo fue completado, ya que Timothy Jollie junior estudió en la Academia de su padre Attercliffe, y luego de ser asistente en Upper Chapel, en Sheffield, se convirtió en asistente de Matthew Clarke en Miles Lane Chapel, Cannon Street, Londres, E.C., y luego pastor de esa congregación por 31 años.5

Siendo su salud precaria, la señora Jollie se dedicó a escribir consejos espirituales para su hija menor que hacen eco de lo que le había escrito a Betty hacía tiempo. Con una fe firme que había superado las tormentas de persecución y prosperidad, escribe:

“Mi querida hija, no sé por cuánto tiempo tenga a bien el Señor darme la vida, hay muchas alarmas. Por ello, dejo escrito estas cosas para que cuando mires atrás y veas lo que el Señor ha hecho por ti, admires cómo te ha seguido con su bondad y te ha dado misericordia cuando las necesitabas. También te dejo unas cosas que te puedan ser útiles si eres cautelosa en practicarlas.

  1. Asegúrate de orar a Dios diariamente. Trabaja para obtener el asombro de Él en tu corazón y un verdadero sentido de tus necesidades. Presta atención ante la formalidad y busca aceptación en y a través de Cristo Jesús.
  2. Lee cada día la Palabra de Dios. Hazla el hombre de tu consejo, deja que sea la guía para toda tu vida.
  3. Ocúpate constantemente de la palabra predicada cuando le agradare al Señor el concederte el honor. Presta atención ante las excusas insignificantes que se presenten para desviarte de tu labor.
  4. Presta atención ante la hipocresía y la formalidad en todas las tareas que vayas a realizar.
  5. Abunda en meditar en Dios y en Jesucristo y en la eternidad.
  6. Sé muy cautelosa en realizar tareas pertinentes. Cuanto más practiques esto, más cómoda te sentirás en tu vida.
  7. Mi querida hija, sobre todo, sé ungida en Cristo Jesús, sin el cual no podemos ser felices ni aquí ni en lo venidero.
  8. Ora diariamente que Dios te ayude a amarlo y a amar su palabra y mandamientos y a su pueblo, sin importar quienes sean.
  9. Presta atención ante un espíritu crítico. Trabaja para amar la imagen de Dios, donde sea que la veas.
  10. Trabaja para aquella caridad de la que el apóstol habla en 1 Corintios 13. No tomes la religión por nombre; eso es lo que ha hecho tanto mal en esta pobre nación por la que tenemos motivo para lamentar.

La señora Elizabeth Jollie murió en 1709 a la edad de 62 años, habiendo ejemplificado Proverbios 31:10-30: “Mujer hacendosa, ¿quién la hallará? Su valor supera en mucho al de las joyas. En ella confía el corazón de su marido, y no carecerá de ganancias. Ella le trae bien y no mal todos los días de su vida… Abre su boca con sabiduría, y hay enseñanza de bondad en su lengua… Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada… Engañosa es la gracia y vana la belleza, pero la mujer que teme al Señor, ésa será alabada”.

Este artículo fue publicado primero en la edición de mayo de 1977, edición de Banner of Truth Magazine.

Notas

  1. J.E. Manning, A Good Puritan Woman: Pages from the diary of Mrs Timothy Jollie, (Sheffield Independent Press, 1900)
  2. “A Puritan Woman of Sheffield”. Sheffield Local History Archives. Local Notes and Queries, Vol.2, p 48, 1875.
  3. Suave (lujuriosa) conducta.
  4. “La Revolución Gloriosa’ de 1688 que llevó a William y Mary al trono inglés, y causó al católico romano James II escaparse al extranjero.
  5. Gatty’s Joseph Hunter’s Hallamshire (1869), pp 293 et seq., 425.

Soldados De Jesucristo

http://sdejesucristo.org

Nuestra misión es predicar el evangelio de la gracia de Dios haciendo un llamado al arrepentimiento y fe en Jesucristo.

En un bar (1)

Domingo 14 Mayo

El hijo menor se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente.

Lucas 15:13

Y volviendo en sí, dijo:… Me levantaré e iré a mi padre.

Lucas 15:17-18

En un bar (1)

Según las costumbres anglosajonas, algunos cristianos entraron en un bar, distribuyeron tratados y empezaron a cantar un himno. Esteban y dos de sus amigos reaccionaron violentamente y arrugaron los tratados antes de tirarlos. Al salir, Esteban tuvo una idea:

–¡Eh, chicos, vamos a hacer como si fuésemos religiosos! Daré un gran sermón sobre el hijo pródigo, y ustedes cantarán. Los tres amigos decidieron llevar a cabo su plan en un bar donde no eran conocidos. Necesitaban una Biblia, por ello Esteban le pidió una a su vecino quien, muy contento de ver su repentino interés por ese libro, le dijo que podía conservarla.

Encontrar la parábola del hijo pródigo no fue fácil, por ello Esteban recorrió todo un evangelio. Algunos pasajes le trajeron recuerdos, pero otros eran completamente nuevos para él. De repente se preguntó: ¿y si me hacen preguntas después del sermón?

La tarde señalada los amigos se encontraron en el bar. El ambiente era el mismo: olor a licor, risas fuertes… Desde su llegada empezaron a cantar: «Si supiera qué Salvador tengo…». Después de algunos instantes de sorpresa, les lanzaron todo tipo de artefactos. Dos hombres se les acercaron mostrando sus puños, pero un hombre fornido se levantó y empujó a los agresores.

–¡Déjenlos cantar!

Nadie se atrevía a contradecirlo. Sus manos de boxeador y su apariencia amenazante imponían el respeto. Esteban predicó y ese hombre lo escuchó atentamente. Los demás continuaron jugando a las cartas. Después del sermón los tres amigos salieron.

(mañana continuará)

1 Reyes 11:1-22 – Marcos 12:1-27 – Salmo 57:6-11 – Proverbios 15:15-16

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El fruto del Espíritu (3)

Sábado 13 Mayo

El Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer.

Romanos 15:13

El gozo del Señor es vuestra fuerza.

Nehemías 8:10

El fruto del Espíritu (3)

El gozo

El gozo y la paz, que forman parte del fruto del Espíritu Santo, embellecen la vida del cristiano y son portadores de esperanza. Son rasgos poco comunes en nuestro mundo que a menudo vive amargado y atormentado…

El gozo, como cualquier emoción, puede ser por una buena o una mala razón. Si es mala, “vuestra risa se convierta en lloro, y vuestro gozo en tristeza”, dice el apóstol (Santiago 4:9). Pero en la Biblia la mayoría de las veces el gozo es algo positivo, señal de un vínculo estrecho con Dios (Hechos 8:39).

Algunos cristianos piensan que el gozo no es primordial en la vida cristiana. Sin embargo, este ocupa el segundo lugar en la lista que describe el fruto del Espíritu. Es verdad que en medio de las circunstancias difíciles de la vida puede parecer imposible regocijarse. Pero para cada creyente, el Espíritu Santo es un intercesor y un consolador: permite que el gozo fluya, incluso donde la tristeza reina (Hechos 16:22-25), algo parecido a los rayos solares que penetran a través de la niebla en un día de invierno.

Este es el testimonio de muchos cristianos prisioneros por su fe. Experimentaron angustias, sufrimientos, pero también un gozo interior profundo, el “gozo del Espíritu Santo” (1 Tesalonicenses 1:6). Uno de ellos escribió poco antes de morir en la cárcel: «En mi enfermedad, siempre conservo el gozo en mi corazón».

Amigos cristianos, no nos dejemos robar el gozo que Dios nos da. Este puede conducir a quienes nos rodean a ir a la fuente de ese gozo: Jesús mismo, quien lo renueva en nosotros mediante la acción de su Espíritu.

(continuará el próximo sábado)

1 Reyes 10 – Marcos 11:20-33 – Salmo 57:1-5 – Proverbios 15:13-14

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¿Qué dice la Biblia acerca de ser una madre cristiana?

¿Qué dice la Biblia acerca de ser una madre cristiana?

El ser una madre, es un papel muy importante que el Señor elige otorgar a muchas mujeres. Se dice que una madre cristiana debe amar a sus hijos (Tito 2:4-5), en parte para que no reproche al Señor y al Salvador cuyo nombre lleva.

Los hijos son un regalo del Señor (Salmo 127:3-5). En Tito 2:4, aparece la palabra griega “phileoteknos” en referencia a las madres que aman a sus hijos. Esta palabra representa una clase especial de “amor materno”. La idea que se desprende de esta palabra es la de “preferir” a nuestros hijos, “cuidar” de ellos, “alimentarlos”, “abrazarlos con amor”, “cubrir sus necesidades”, “entablar una tierna relación” con cada uno como si fuera el único salido de la mano de Dios.

A las madres cristianas se les ordena varias cosas en la palabra de Dios:

Estando disponibles – mañana, tarde y noche (Deuteronomio 6:6-7)

Involucrándose – interactuando, acordando, pensando y procesando la vida juntos (Efesios 6:4)

Enseñándoles – con las Escrituras, el punto de vista bíblico del mundo (Salmo 78:5-6, Deuteronomio 4:10; Efesios 6:4)

Entrenándoles – ayudando al niño a desarrollar sus habilidades y descubrir su potencial (Proverbios 22:6) y sus dones espirituales (Romanos 12:3-8 y 1 Corintios 12)

Disciplinándoles – Enseñándoles en el temor de Dios, señalándoles sus límites en forma consistente, amorosa y firme (Efesios 6:4; Hebreos 12:5-11, Proverbios 13:24, 19:18, 22:15, 23:13-14; 29:15-17)

Nutriéndoles – Proveyendo un ambiente de constante soporte verbal, libertad de fallar, aceptación, afecto y amor incondicional (Tito 2:4; 2 Timoteo 1:7; Efesios 4:29-32, 5:1-2; Gálatas 5:22; 1 Pedro 3:8-9)

Siendo un modelo de integridad – Viviendo lo que enseñes, siendo un modelo mediante el cual un niño pueda aprender, “captando” la esencia de una vida piadosa (Deuteronomio 4:9, 15, 23; Proverbios 10:9, 11:3; Salmo 37:18, 37).

La biblia nunca ordena que todas las mujeres deban ser madres. Sin embargo, dice que aquellas que son bendecidas para ser madres, deben tomar seriamente esa responsabilidad. Las madres tienen un único y crucialmente importante papel en la vida de sus hijos. La maternidad no es un trabajo o tarea desagradable. Así como una madre lleva a su bebé durante el embarazo, y alimenta y cuida de niño durante su infancia, así también las madres juegan un constante papel en las vidas de sus niños, adolescentes y jóvenes adultos, y aún cuando llegan a la edad madura y tienen hijos. Mientras que el papel de la maternidad debe cambiar y desarrollarse, el amor, el cuidado, la educación y el ánimo que da una madre, nunca debe terminar.

Cómo la ideología de género está dañando la academia – Ana Ávila

Lucía es amante de la ciencia,1 pero sobre todo del Señor de la ciencia. Desde pequeña ha disfrutado conocer cómo funciona el cosmos y hoy pasa sus días mirando el cielo con asombro. Disfruta contemplar la gloria de Dios, a veces a través de la ventana (Sal 19:1) y a veces en una hoja de cálculo. Hace poco recibió su magíster en una de las casas académicas más importantes de Chile y tiene el deseo de continuar con su educación. Pero no está segura.

Su amor por el saber no ha disminuido; dejar de aprender no es una opción. La pregunta es cómo seguir. ¿Valdrá la pena invertir los siguientes cinco años de su vida en un doctorado o será mejor dedicarse al estudio independiente? Si yo tuviera la opción, sin duda me matricularía en el doctorado, pensé. Pero luego escuché una de sus razones para dudar y me dejó helada: «Mi universidad crea monstruos».

Hay un conjunto de ideas que han capturado el alma mater de Lucía, así como a muchas otras instituciones en Latinoamérica y en el resto del mundo. Sus defensores pregonan que la identidad de género es algo separado del sexo. Afirman que ser hombre o mujer no se determina por la biología, sino por el sentir interno de ser hombre o mujer. En la mayoría de personas, se dice, ese sentimiento interno corresponde con las características biológicas que uno esperaría encontrar en un hombre o en una mujer, pero en algunas no. La conclusión «lógica» de todo esto es que cualquier ser humano es mujer por el simple hecho de sentirse mujer y hombre por el simple hecho de sentirse hombre, independientemente de su biología.

Un pensador necesita a otros pensadores que respondan a sus ideas extrañas, refutándolas en el error y afirmándolas en la verdad

Las ideas extrañas no son algo nuevo en la academia. Siempre han existido pensadores que intentan romper el statu quo para promover una nueva manera de concebir el mundo. Con todo, si un pensador desea ser fiel en el avance del conocimiento, el cual en teoría es el propósito de la academia, necesita a otros pensadores que respondan a sus ideas extrañas, refutándolas en el error y afirmándolas en la verdad.

Pero hoy, cuando de «género» se trata, eso es prácticamente imposible.

La presión para callar
«No puedes decir nada en contra», me dijo Lucía. «Conozco a varios profesores que no están de acuerdo con esas ideas, pero prefieren evitar dar a conocer su postura para no meterse en problemas». ¿De qué temen? De los «monstruos», es decir, los jóvenes activistas iracundos, fanáticos y agresivos dedicados a la propagación por medio de la violencia de esta manera de concebir el género. Ante cualquier objeción, disparan sus armas —manifestaciones, vandalismo o turbas de redes sociales— para humillar al disidente, tachándolo de transfóbico y promotor de un «discurso de odio».

Para ver las consecuencias de todo esto solo tenemos que mirar lo que sucede en el llamado «mundo desarrollado». Los avances económicos de estos países los convierten en punta de lanza, para bien y para mal, y el resto de las naciones solemos seguir sus pasos en materia política y social sin hacer demasiadas preguntas. La buena noticia es que no tenemos que hacerlo. Debemos examinarlo todo con cuidado, reteniendo lo bueno mientras nos abstenemos de toda forma de mal (1 Ts 5:21-22).

Latinoamérica puede decidir seguir a los países «desarrollados» o mirar las consecuencias de sus ideas y decidir cambiar el rumbo

Evaluemos, por ejemplo, el caso del Dr. Jordan Peterson, profesor y psicólogo clínico canadiense. Peterson saltó a la fama en 2016, tras oponerse en público a una ley que podría ser usada para obligar a las personas a referirse a otros usando sus pronombres de preferencia (hablar de una mujer biológica usando «él» o de un hombre biológico usando «ella»). Desde entonces, Peterson ha argumentado abiertamente en contra del discurso popular sobre el género, a veces de maneras que podrían caracterizarse como abrasivas.2 A nadie le sorprenderá saber que Jordan Peterson es una figura pública polémica, amado por muchos y odiado por tantos más.

Tras múltiples «cancelaciones» en Internet, la situación se puso difícil para Peterson en enero de 2023. «El Colegio de Psicólogos de Ontario quiere retenerme para que me comporte correctamente. Esto debería preocupar a todos», escribió en un editorial (en inglés). Sus críticas en Twitter sobre transexualidad, política y el COVID, ocasionaron que el Colegio le ordenara llevar un curso de comunicación en redes sociales. Peterson explicó:

Debo pagarlo yo (unos cientos de dólares por hora) y durante un periodo de tiempo que determinarán únicamente quienes me reentrenarán y se beneficien de ello. ¿Cómo se determinará esto? Cuando esos mismos reeducadores —esos expertos— se hayan convencido de que he aprendido la lección y me comportaré correctamente en el futuro.

Peterson se rehusó a acatar la orden del Colegio. Mientras escribo esto, está por verse si eso representa que su licencia para practicar psicología clínica en Ontario sea removida.

Un hombre que ha vendido millones de copias de sus libros y que llena teatros alrededor del mundo puede darse el lujo de perder su licencia. Si llega a suceder, el impacto emocional será duro, pero al final del día Peterson estará bien. ¿Pero qué pasa con el resto de los profesionales de su campo en Canadá? Ellos han aprendido la lección: «di lo que el Colegio quiera o no digas nada».

Si no estás de acuerdo con que las personas «transicionen», usando operaciones u hormonas para modificar su cuerpo de manera permanente, no digas nada.

Si no crees que una mujer transgénero es exactamente lo mismo que una mujer biológica, no digas nada.

Si crees que alguien puede aprender a sentirse más cómodo en su cuerpo, a pesar de que siente que es del sexo opuesto, no digas nada.

Los profesionales de la salud en Canadá ya no tienen la libertad de decir algo que vaya contra la narrativa central del nuevo discurso de género. Hacerlo es arriesgarse a perder su carrera profesional y a dejar de llevar alimento a su familia. Sí, Jordan Peterson estará bien, pero el resto de Canadá sufrió una pérdida terrible.

¿Esperaremos a que eso nos suceda también?

La esperanza de permanecer
Las ideologías surgen cuando las cosmovisiones se imponen sobre otros a través de la violencia o la coerción. Enfrentarse a ellas siempre representa un costo.

Alice von Hildebrand, por ejemplo, fue profesora de filosofía durante treinta y siete años, a partir de 1947, en Hunter College, Estados Unidos: desde el principio de su carrera se opuso al relativismo y pagó el precio por ello. Fue rechazada por sus colegas, relegada a enseñar por las noches las clases que nadie más quería impartir y recibió la titularidad académica solo después de catorce años de enseñanza.

En su libro Memorias de un feliz fracaso, la Dra. Von Hildebrand relata sus luchas en el mundo académico, mostrando que no es nuevo que este sea un campo de batalla: «La libertad académica se limitó a los relativistas, subjetivistas y ateos», escribió. «Aquí no hay “pluralismo sano”» (loc. 715).

Lucía entiende esto, pero no pierde la esperanza. «Cuando hablamos en privado, con una o dos personas, podemos tener buenos intercambios acerca del tema», me dijo. «Muchas personas están dispuestas a escuchar. Es cuando se reúne la turba que las cosas se ponen difíciles».

Oremos para que Dios levante académicos valientes para examinarlo todo, retener lo bueno y desechar la maldad

Latinoamérica puede decidir seguir a los países «desarrollados» o mirar las consecuencias de sus ideas y decidir cambiar el rumbo. Oremos para que muchos ojos sean abiertos; para que los que restringen la verdad (como nosotros lo hacíamos antes) corran a Cristo en arrepentimiento.

Oremos para que Dios levante académicos valientes para examinarlo todo, retener lo bueno y desechar la maldad. Apoyemos a quienes ya lo están haciendo o quieren equiparse para entrar en esta lucha. Nuestros hijos lo necesitan. En las palabras de la Dra. Von Hildebrand:

Religiosa, moral, humana y políticamente, [nuestras naciones] solo puede[n] esperar sobrevivir si se mantiene[n] firme[s] en el terreno de la verdad y da[n] a sus hijos el pan del que están hambrientos. Esta es la gran tarea de la educación (loc. 2047).

1 Nombre ficticio, para proteger la identidad de la entrevistada.
2 En junio de 2022, por ejemplo, como respuesta al titular «Elliot Page está “orgulloso” de introducir un personaje trans en Umbrella Academy», Peterson tuiteó: «¿Recuerdan cuando el orgullo era un pecado? Y a Ellen Page un médico criminal simplemente le quitó los pechos» (pues Elliot Page es una persona transgénero: mujer biológica que se presenta ante la sociedad como varón. Hasta 2020, su nombre era Ellen Page).


Ana Ávila es escritora senior en Coalición por el Evangelio, Química Bióloga Clínica, y parte de Iglesia El Redil. Es autora de «Aprovecha bien el tiempo: Una guía práctica para honrar a Dios con tu día». Vive en Guatemala junto con su esposo Uriel y sus dos hijos. Puedes encontrarla en YouTube, Instagram y Twitter.

Cantad al Señor de todo corazón

Viernes 12 Mayo

Cantad al Señor cántico nuevo, porque ha hecho maravillas.
Salmo 98:1
Su alabanza sea en la congregación de los santos.
Salmo 149:1

Cantad al Señor de todo corazón

Cada uno de los 150 salmos de la Biblia fue compuesto por un autor en una etapa particular de su vida. Los pensamientos y las reflexiones expresadas en ellos nos ayudan a comprender las situaciones que atravesamos hoy. También nos llevan a tener confianza en Dios y a alabarlo. Pero a veces leemos muy superficialmente expresiones como: “Señor, la habitación de tu casa he amado” (Salmo 26:8), o “Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado” (Salmo 16:1).

De hecho, muchos salmos o incluso partes de salmos expresan los pensamientos del hombre perfecto: Jesucristo. Si bien es cierto que solo él puede expresarlos y vivirlos absolutamente, cada uno de nosotros puede leerlos ante Dios con una actitud de adoración. Pero ante estos absolutos, ante estas expresiones que sobrepasan nuestra vida de fe, detengámonos para escuchar a Jesús, el Único. Guardemos silencio, apartemos la mirada de nosotros mismos y volvámonos a lo que Jesús sentía en lo profundo de su ser, especialmente en sus sufrimientos, pero también en su vida de hombre y de adorador perfecto.

Seguramente ciertos salmos puestos en su boca resonarán entonces de forma nueva, más fuerte y más real. Retomemos cada salmo, lentamente, redescubriéndolos uno a uno a la luz de Cristo, y cantemos a Dios de todo corazón. Cantemos su alabanza (Salmo 149:1). Así Jesús nos invita a entrar en sus pensamientos, en sus oraciones e intercesiones.

¡Sin duda alguna, los salmos también son para nosotros!

1 Reyes 9 – Marcos 11:1-19 – Salmo 56:8-13 – Proverbios 15:11-12

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)
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Saulo de Tarso

Jueves 11 Mayo

(Saulo) oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues.

Hechos 9:4-5

En seguida (Saulo) predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que este era el Hijo de Dios.

Hechos 9:20

Saulo de Tarso

Para Saulo de Tarso la situación era clara: los que hablaban de Jesús formaban una secta peligrosa. Había que detenerlos, aunque fuese con violencia. Saulo pensó que había encontrado la solución, pero no había previsto un punto muy importante: Jesús estaba vivo. Saulo había oído a Esteban, el primer mártir, afirmar que veía a Jesús en el cielo, pero no había comprendido y seguía persiguiendo a los cristianos.

Un día, cuando iba camino a Damasco para arrestar a los cristianos, repentinamente se vio rodeado por un resplandor de luz del cielo, y cayó a tierra. Entonces una voz lo interpeló: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues”. En ese instante comprendió y aceptó que Jesús estaba vivo y que era el Señor (ver Hechos 25:19). ¡Toda su vida fue transformada inmediatamente!

Sin tardar anunció que Jesús era el Mesías anunciado por los profetas, el Hijo de Dios. Luego, progresivamente, se apropió el mensaje cristiano y, sobre todo, comprendió que Jesús había muerto para llevar sus pecados.

Amigo lector, ¿está convencido de que Jesús vive? Él no le ha hablado directamente, como a Pablo, pero le interpela mediante este mensaje bíblico. Lo que vivió Saulo, quien se convirtió en el apóstol Pablo, está escrito en la Biblia, para que usted aprenda de su experiencia y crea. ¿Qué hizo Saulo? Oró al Señor. Esto es lo que usted puede hacer, y así, teniendo un encuentro con el Salvador, nacerá a la fe. Luego su voz se añadirá a la de los testigos de Jesús.

1 Reyes 8:31-66 – Marcos 10:32-52 – Salmo 56:1-7 – Proverbios 15:9-10

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)
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Cambios doctrinales | Keith A. Mathison

Cambios doctrinales
Por Keith A. Mathison

Nota del editor: Este es el quinto y último capítulo en la serie especial de artículos de Tabletalk Magazine: La historia de la Iglesia | Siglo XX

Los que vivían al iniciar el siglo XX lo hacían en un mundo que ya había experimentado y seguía experimentando cambios sin precedentes. Habían caído antiguos imperios y otros estaban alcanzando la cima de su poder con el colonialismo en su apogeo. Las guerras provocadas por todos estos acontecimientos parecían no tener fin. Además, la segunda Revolución industrial estaba creando cambios sociales y económicos masivos a medida que la gente huía de las granjas y llenaba las ciudades. En lo filosófico, la academia seguía enfrentándose a las preguntas sobre autoridad, asociadas al auge de la modernidad. Sin embargo, nadie sabía en aquel momento que los cambios que habían presenciado no serían nada comparados con los que traería el siglo XX.

LOS CAMBIOS DOCTRINALES EN EUROPA Y AMÉRICA
Desde el comienzo de la Ilustración, los temas sobre la autoridad habían permanecido en la primera línea del pensamiento filosófico y teológico. La mayoría ya no daba por sentada la autoridad de la Escritura ni la de la iglesia, pero ¿cuál era la alternativa? Muchos pensadores de la Ilustración habían colocado a la razón humana en ese exaltado papel pero otros reaccionaron contra ello, como los influenciados por el Romanticismo. Los teólogos cristianos también se vieron obligados a responder. En el siglo XIX, el padre del liberalismo alemán, Friedrich Schleiermacher, propuso como autoridad el sentimiento religioso interior. Varios anglicanos destacados intentaron encontrar la autoridad en la historia cristiana primitiva, creando el Movimiento de Oxford. La Iglesia católica romana había establecido el dogma de la infalibilidad papal en el Concilio Vaticano I (1869-70). Sin embargo, en medio de todo esto, todavía había muchos que seguían defendiendo la autoridad de la Biblia, como los teólogos reformados del Seminario Teológico de Princeton.

Esta dinámica continuó a comienzos del siglo XX. El liberalismo alemán siguió desarrollándose e intentando adaptarse a las formas modernas de pensamiento. Adolf von Harnack, por ejemplo, publicó en 1901 su libro ¿Qué es el cristianismo?, en el que sostenía que la verdad interna del cristianismo se mantenía firme a pesar de que su forma doctrinal externa había experimentado cambios desde el primer siglo. Al mismo tiempo, la Escuela Alemana de Historia de las Religiones hacía su aparición con sus afirmaciones de que el cristianismo era una combinación sincretista de pensamiento judío, religiones mistéricas y filosofía estoica. Las crisis en las ciudades provocada por la urbanización masiva condujo al auge del evangelio social bajo el liderazgo de teólogos como Walter Rauschenbusch. Sin embargo, este liberalismo protestante no permanecería sin ser desafiado. Tras la Primera Guerra Mundial, varios teólogos alemanes, como Karl Barth, Emil Brunner y Rudolf Bultmann, reaccionaron contra la teología liberal, desarrollando lo que se conocería como la teología dialéctica. Estos hombres diferían del liberalismo alemán principalmente en la relación de la historia y la fe, pero las diferencias entre ellos acabarían conduciéndolos en direcciones distintas. Bultmann desarrolló su teología en la línea de la filosofía existencial y tendría una influencia enorme, sobre todo en las décadas centrales del siglo XX, pero el teólogo más influyente entre los teólogos dialécticos resultó ser Karl Barth, cuya neoortodoxia sigue influyendo en teólogos de todas las tendencias hasta nuestros días.

Tras la devastación de la Segunda Guerra Mundial, se desarrolló la teología política, especialmente en los escritos de Jürgen Moltmann. Su obra influiría enormemente en el auge y desarrollo de diversas formas de teología de la liberación (teología de la liberación latinoamericana, teología feminista, teología negra, etc.). Estas teologías de la liberación tenían como objetivo rehacer el orden social política, económica y culturalmente. Varios teólogos de la liberación combinaron su visión de un nuevo orden social con una doctrina de Dios basada en la filosofía procesual de Alfred North Whitehead. La teología del proceso, tal y como la desarrollaron teólogos filosóficos como Charles Hartshorne y John B. Cobb, supuso una redefinición radical de la doctrina tradicional de Dios. En la teología del proceso, Dios tiene tanto un aspecto eterno e inmutable de Su naturaleza como un aspecto en continuo cambio o devenir de Su naturaleza. La teología del proceso considera a Dios algo así como el «alma» del mundo, por decirlo de alguna manera, y por ello se identifica con el panenteísmo.

LOS CAMBIOS DOCTRINALES DENTRO DEL EVANGELICALISMO
La teología evangélica del siglo XX también experimentó varios desarrollos importantes. La teología dispensacional, que había comenzado en Gran Bretaña bajo el liderazgo de John Nelson Darby, empezó a extenderse en Estados Unidos a través de conferencias bíblicas y la creación de escuelas bíblicas. La teología dispensacional se basa en la idea de que existen dos pueblos de Dios, Israel y la iglesia. Es más conocida por sus doctrinas escatológicas distintivas, incluido el rapto de la iglesia antes de la tribulación. La teología dispensacional recibió su impulso más significativo en 1909 con la publicación de la Biblia Anotada de Scofield. La teología dispensacional se convirtió en el punto de vista mayoritario del evangelicalismo estadounidense durante gran parte del siglo XX gracias a las enseñanzas de teólogos como John F. Walvoord, Charles Ryrie y J. Dwight Pentecost.

El mayor desafío numérico a la supremacía de la teología dispensacional en el siglo XX fue el pentecostalismo. Los primeros pentecostales se caracterizaban por creer en una segunda obra de Dios en la vida de los creyentes: el bautismo del Espíritu Santo, confirmado por el don de hablar en lenguas. Los primeros pentecostales creían que estas lenguas eran verdaderas lenguas extranjeras, pero muchos pentecostales contemporáneos identifican las lenguas con una forma u otra de habla extática o lenguas angélicas. En las décadas de 1960 y 1970, el movimiento carismático surgió debido a la influencia del pentecostalismo en muchos evangélicos de distintas denominaciones. Al final, el pentecostalismo se convirtió en uno de los movimientos de más rápido crecimiento en la historia de la iglesia y se ha extendido por todo el mundo.

La teología reformada del siglo XX experimentó altibajos. El Seminario Teológico de Princeton, que había sido el baluarte de la teología reformada estadounidense en el siglo XIX, fue tomado gradualmente por teólogos liberales durante la llamada Controversia fundamentalista modernista. Sin embargo, de sus cenizas surgió el Seminario Teológico de Westminster bajo la dirección de J. Gresham Machen. Sin embargo, siguió siendo una escuela bastante pequeña, por lo que el liderazgo intelectual del evangelicalismo durante la mitad del siglo XX recayó en cierta medida en evangélicos como Carl F.H. Henry. No obstante, en ocasiones los teólogos evangélicos y reformados combinaban sus fuerzas para tratar cuestiones que afectaban a ambos. El debate sobre la inerrancia bíblica en las décadas de 1970 y 1980 es un ejemplo importante. Los evangélicos conservadores se vieron obligados a enfrentarse a la negación de la inerrancia en las iglesias y seminarios evangélicos. El resultado fue la Declaración de Chicago sobre la inerrancia bíblica, un documento que se sigue utilizando ampliamente en los círculos cristianos.

UN RESURGIR DE LA TEOLOGÍA REFORMADA
Durante varias décadas del siglo XX, la teología reformada fue una especie de pequeña realidad clandestina. Se publicaban muy pocos libros reformados. Los teólogos reformados eran relativamente desconocidos en el amplio mundo evangélico. Pero a partir de la segunda mitad del siglo XX, la teología reformada empezó a resurgir. En la década de 1950, Banner of Truth Trust (Estandarte de la Verdad) comenzó a publicar una revista y obras clásicas de teología reformada. Con el tiempo, otras editoriales siguieron su ejemplo, con el resultado de que hoy en día se puede acceder fácilmente a miles de libros de teólogos reformados clásicos y contemporáneos.

Durante gran parte del siglo XX, el Seminario Teológico de Westminster en Filadelfia fue el único seminario reformado importante en los Estados Unidos. El Dr. Francis Schaeffer, con su aguda visión de la cultura, la teología y el posmodernismo, comenzó su formación en este seminario. Se convirtió en una figura clave en los primeros brotes del resurgimiento reformado. En la década de 1960, se fundó el Reformed Theological Seminary (Seminario Teológico Reformado) en Jackson, Mississippi. Desde entonces, se han creado otros muchos seminarios y campus reformados. Estos seminarios reformados han contribuido al rápido crecimiento de las denominaciones reformadas.

Los estudiosos del evangelicalismo del siglo XX suelen señalar la influencia de las organizaciones reformadas paraeclesiásticas en el resurgir del calvinismo. En 1971, el Dr. R.C. Sproul fundó el Centro de Estudios del Valle de Ligonier, en Ligonier, Pensilvania, con el apoyo de Dora Hillman y otros líderes cristianos de Pittsburgh. El centro de estudios se basaba en el modelo del propio centro de estudios europeo de Francis Schaeffer en Suiza, llamado L’Abri. En los primeros años del Centro de Estudios del Valle de Ligonier, los estudiantes asistían a conferencias de profesores como el Dr. Sproul, el Dr. John Gerstner y otros pastores y eruditos reformados. Las conferencias se grababan y se distribuían por todo el país y por todo el mundo. Gracias a la labor de este centro de estudios —que más tarde pasó a llamarse Ministerios Ligonier— y de otros grupos, los principios clave de la teología reformada, incluidos los cinco puntos del calvinismo y las cinco solas de la Reforma, tuvieron una mayor aceptación en el movimiento evangélico general a finales del siglo XX.

En las últimas décadas ha aumentado el interés por la teología reformada entre jóvenes y mayores. Nuevas editoriales están traduciendo por primera vez obras clásicas de la teología reformada a nuestro idioma. Los eruditos reformados están a la vanguardia del trabajo en filosofía cristiana y teología histórica. Sigue habiendo problemas, como siempre los habrá hasta que Cristo vuelva, pero hay motivos de aliento en estos avances contemporáneos, e incluso si no viéramos razones externas para sentirnos alentados, seguimos estando llamados a permanecer fieles a la Palabra de Dios y a seguir adelante en este y en todos los siglos.

Publicado originalmente en: Tabletalk Magazine
Keith A. Mathison
El Dr. Keith A. Mathison es profesor de teología sistemática en Reformation Bible College en Sanford, Florida. Es autor de varios libros, entre ellos The Lord’s Supper: Answers to Common Questions [La Cena del Señor: respuestas a preguntas comunes].

¡No DESMAYES!

Manantiales en el Desierto | Lettie B. Cowman

Mayo 10
¡Hubiera yo desmayado, si no …! Salmo 27:13

¡No DESMAYES!

¡Cuán grande es la tentación en estas circunstancias!

¡Cómo se deprime el alma, enferma el corazón y vacila la fé ante las grandes pruebas con que nos enfrentamos en esta vida en tiempos de pérdidas y sufrimientos especiales!

Entonces decimos: «Ya no puedo soportar esto por más tiempo; estoy desfalleciendo.»

¿Qué haré? Dios me dice que no desmaye.

¿Pero qué es lo que puede hacer uno cuando está desmayándose?

¿Qué es lo que haces cuando estás a punto de desmayarte físicamente?

Tú no puedes hacer nada.
En tu desfallecimiento caes sobre el hombro de algún amigo fuerte y querido. Te apoyas firmemente sobre él, descansas y continúas apoyado y confiado.
Esto es lo que nos sucede cuando estamos tentados a caer bajo la aflicción. El mensaje de Dios para con nosotros no es «esforzaos y cobrad ánimo,» porque Él sabe que hemos perdido nuestra fortaleza y valor; sino, aquellas palabras cariñosas, «Estad quietos, y conoced que yo soy Dios
Hudson Taylor, se encontraba tan debilitado en los últimos meses de su vida, que escribió a un amigo diciendo, «Estoy tan débil que no puedo escribir, ni leer la Biblia, ni aún siquiera
puedo orar. Lo único que puedo hacer es continuar apoyado en los brazos de Dios, como un niño pequeño, y confiar

Este hombre tan extraordinario, con todo su poder espiritual llegó a tal estado de sufrimiento físico y debilidad, que lo único que podía hacer, era reposar y confiar, y esto es lo que Dios pide a todos sus amados hijos, cuando sus debilidades aumentan con el cruel fuego de la tribulación. No trates de ser fuerte, sino estate quieto y conoce que El es Dios y El te sostendrá y ayudará.

«Dios guarda su mejor ayuda que consolará los desmayos más profundos.»
«Esfuérzate y aliéntese tu corazón.» Salmo 27:14

¿Qué es la necedad? | Santiago Armel

¿Qué es la necedad? | Santiago Armel

La forma principal para referirse al necio en el Antiguo Testamento es la palabra hebrea כְּסִיל (kĕsîl). Se refiere a alguien que no solo es un ignorante, sino que de manera deliberada rechaza la sabiduría de Dios. Pero el necio no solo se opone a la sabiduría, sino que además es caracterizado por la imprudencia y la torpeza en todo su actuar. Por su parte el Nuevo testamento usa principalmente tres términos en griego para el necio. En primer lugar, el termino ἄφρων (aphrōn) que se refiere a alguien con un discernimiento pobre, también podría describir a uno que se considera experto en la religión, pero carece de conocimiento verdadero de Dios. En segundo lugar μωρός (mōros) que enfatiza las acciones de alguien que es un tonto o insensato y que, por consiguiente, sus juicios, acciones y palabras carecen de cualquier utilidad. Es la idea de «una falta de capacidad para el pensamiento o la acción correcta». Finalmente, el término ἀνόητος (anoētos) que se refiere a alguien que no piensa bien.

La necedad es la característica principal de aquel que decide abandonar a Dios en sus caminos. Para tener una comprensión amplia de la necedad, a continuación, se enlistarán algunas inclinaciones que caracterizan a los hombres necios y una última realidad esperanzadora para ellos.

El necio se inclina a la idolatría

La idolatría es la inclinación de adorar algo más en vez de a Dios. La tendencia natural del necio es dirigir su adoración a lo creado en vez de al creador (Jer. 10:8Ro. 1:21-25). Esto algunas veces se manifestará con ateísmo declarado y otras veces con ateísmo practico. El ateo declarado quiere convencer a su corazón de que Dios no existe, mientras que el ateo practico, aunque dice creer en Dios, vive su vida como si Él no existiera. El ateo declarado no asiste a la iglesia, mientras que el ateo practico repleta las bancas de muchas congregaciones.

La Biblia afirma que esta clase de necedad lleva a los hombres a la corrupción total (Sal. 14:1), a cometer actos abominables y alejarse del bien (Sal. 53:1). El necio injuria a Dios todo el día con sus palabras o con sus actos (Sal. 74:22).

El necio se inclina a la desobediencia

Ya que el necio rechaza lo que Dios tiene que decir, entonces su patrón característico de vida es la desobediencia. Es alguien falto de entendimiento en sus decisiones (Sal. 94:8). La Biblia lo describe como uno que se divierte haciendo el mal (Pr. 10:2313:1914:9). El hombre necio es arrogante y descuidado (Pr. 14:16) y no solo le basta con ser un díscolo, sino que le encanta mostrar a otros su sandez (Ec. 10:3).

El necio se inclina a la ira pecaminosa

Uno de los síntomas mas evidentes de un necio es que no puede controlar su carácter. Es explosivo, irritable, altivo y grosero en su conversar. Pero sobre todas las cosas, el necio se caracteriza por reaccionar de manera rápida (Pr. 12:16Ec. 7:9). No se detiene a considerar las consecuencias de sus actos o de sus palabras, simplemente actúa por impulsos y comúnmente está recibiendo las consecuencias dañinas de sus actos precipitados (Job. 5:2Pr. 10:21).

El necio se inclina a la destrucción propia

Este hombre desprovisto de sabiduría está causando su propia destrucción. Muchas veces el necio se pregunta: «¿Por qué nadie me honra y me respeta?». Parece ignorar que la causa de su mala reputación es su actuar cotidiano. Puede pensar que todos alrededor son perversos y hostiles con él, pero no se detiene a meditar en que él mismo es el problema (Pr. 3:35).

El necio según la Biblia busca su propia destrucción de varias formas, pero hay dos que destacan. En primer lugar, es un hombre rebelde a las autoridades (Pr. 10:8), ante su insurrección recibe el castigo. En segundo lugar, el necio tiene la tendencia a dejarse persuadir fácilmente por el pecado sexual. El pecado sexual acarrea la destrucción de su familia y su reputación. En términos bíblicos, va como el buey al matadero, o como uno en grillos al castigo (Pr. 7:22).

El necio se inclina a lastimar a los que le rodean

El necio no solo se destruye a sí mismo, también lastima a los que están a su alrededor (Pr. 13.20). Por ejemplo, en el libro de Proverbios se enfatiza la realidad de que un hijo necio trae dolor a sus padres (Pr. 10:1). Esta realidad puede suceder con hijos menores que actúan de manera descontrolada y traen vergüenza a sus papás. También con hijos jóvenes que actúan con rebeldía y sin freno a sus deseos y traen descredito a toda la familia. Finalmente, un hijo adulto y necio trae dolor a toda la familia pues constantemente todos son afectados por las malas decisiones que toma en cada área de su vida, esto incluye lo laboral, emocional, financiero, entre otras. Es por esta razón que la Biblia exhorta a los padres a ayudar a sus hijos a abandonar el camino de la necedad desde temprano. La biblia da esta instrucción en los siguientes términos: «La vara y la reprensión dan sabiduría, pero el niño consentido avergüenza a su madre» (Pr. 29.15).

El necio se inclina a ser orgulloso

El necio se tiene a sí mismo en muy alta estima. Se percibe mucho más grande e importante de lo que realmente es. Piensa que sus planes son geniales y que no necesita el consejo de nadie (Pr. 12:15). Su orgullo lo lleva a recibir golpes en la vida una y otra vez, esto debido a que no acepta la corrección y comete los mismos errores continuamente (Pr. 14:16). La Biblia usa términos muy gráficos para describir esta clase de obstinación cuando dice: «Como perro que vuelve a su vómito es el necio que repite su necedad» (Pr. 26:11). En lugar de reconocer sus faltas, arrepentirse y apartarse, el necio buscará culpar a alguien más de sus desdichas y su orgullo seguirá en aumento.

Hay esperanza: El necio puede ser rescatado por la gracia de Dios

La Biblia es clara en afirmar que todos nacemos en una condición de necedad extrema. De continuo el ser humano busca hacer el mal y no puede glorificar a Dios. Lo que caracteriza al hombre sin Dios es una vida de necedad, desobediencia y esclava de deleites y placeres diversos, viviendo en malicia, envidia, odiándonos unos a otros (Tit. 3:3). Pero es de esa masa de pecadores que Dios decide rescatar almas. Él no vino por los sanos, sino por los enfermos. De lo vil y menospreciado, de lo más necio de este mundo es que Dios decide salvar, por Su elección soberana (1 Co. 1:27).

Amigo lector, si tú te has identificado como un necio, hoy puedes abandonar ese camino si suplicas al Dios del universo que se apiade de ti, te perdone, te justifique y te salve. Él no rechaza un corazón contrito y humillado, ven a Él. Y si estas falto de sabiduría pídela, pues Dios la da abundantemente y sin reproche a los que la buscan.

Santiago Armel

Santiago Armel (M.Div.) Colombiano, hijo de Dios y profesional en comunicación. Vive en Los Ángeles, California con su esposa Juliana y su hijo Santiago. Actualmente realiza un Th.M. en The Master’s Seminary y trabaja en la organización de la Conferencia Expositores. Sirve como maestro en Estudios Bíblicos en Grace Community Church. Puedes seguirlo en Twitter.