Pocas palabras

Pocas palabras

1/7/2018

Los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. (2 Pedro 1:21)

Unas trescientas palabras son suficientes para resumir en español toda la ley moral de Dios en los Diez Mandamientos. Dios la condensó aun más cuando dijo: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mt. 22:37-39). Solo setenta y cinco palabras componen la enseñanza definitiva sobre la oración, el Padrenuestro, en Mateo 6:9-13.

El hombre no tiene tanta capacidad para la brevedad esencial. ¡Hubo una vez un estudio gubernamental para regular el precio del repollo o la col que tenía más de veintiséis mil palabras!

Déle gracias a Dios por la provisión de su Palabra profunda.

DERECHOS DE AUTOR © 2018 Gracia a Vosotros
Usted podrá reproducir este contenido de Gracia a Vosotros sin fines comerciales de acuerdo con la política de Derechos de Autor de Gracia a Vosotros. Disponible sobre el Internet en: www.gracia.org

Gracia denegada y gracia otorgada

ENERO, 07

Gracia denegada y gracia otorgada

Devocional por John Piper

Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios. (Hechos 14:22)

La necesidad de fortaleza interior surge no solo a raíz del desgaste por causa del estrés diario, sino también por el sufrimiento y las aflicciones que llegan de tiempo en tiempo —y ciertamente llegan—.

En el camino al cielo, el sufrimiento es sin duda añadido al cansancio del corazón. Cuando este llega, el corazón duda, y el camino angosto que lleva a la vida parece imposible. Ya nos resulta bastante difícil tener un camino angosto con colinas agotadoras que ponen a prueba la fuerza de la carcacha hasta el límite. Pero ¿qué debemos hacer cuando el auto se avería?

Pablo clamó tres veces con esta pregunta debido a una aflicción en su vida, pero la gracia de Dios no vino en la manera que él había pedido. Llegó de otra forma. Cristo respondió: «Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad».

Vemos que la gracia es otorgada a través del poder de Cristo para sobrellevar una aflicción continua —una gracia otorgada en medio de otra gracia denegada—. Pablo respondió en fe a la suficiencia de esta gracia para el futuro: «Por tanto, muy gustosamente me gloriaré más bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en mí» (2 Corintios 12:9).

A menudo Dios nos bendice con una «gracia otorgada» en medio de una «gracia denegada».

Por ejemplo, en un día de un calor brutal en el mes de julio, la bomba de agua de nuestro auto dejó de funcionar, y nos encontrábamos tirados en la autopista interestatal en Tennessee a veinte millas de distancia del pueblo más cercano.

Yo había orado esa mañana para que el auto funcionara bien y para que llegáramos a nuestro destino a salvo. Nadie más se detuvo cuando salimos del auto y nos paramos al lado. Mi hijo Abraham (que tenía como once años en ese entonces) dijo: «Papá, deberíamos orar». Así que nos inclinamos detrás del auto y le pedimos a Dios gracia para el futuro —una ayuda en tiempo de necesidad—. Cuando levantamos la mirada, una camioneta picop se había detenido.

El chofer era un mecánico que trabajaba como a veinte millas del lugar. Dijo que estaba dispuesto a conseguir las partes y regresar a arreglar el auto. Lo acompañé al pueblo y tuve la oportunidad de compartirle el evangelio. Estábamos en nuestro camino otra vez como cinco horas después.

Lo más notable de esta respuesta a nuestra oración es que llegara en medio de otra oración denegada. Pedimos un viaje sin dificultades. Dios nos dio dificultades. Pero en medio de una gracia denegada tuvimos una gracia otorgada. Estoy aprendiendo a confiar en la sabiduría de Dios en otorgar la gracia que él considere mejor para mí y para mecánicos que no son creyentes y para la fe de niños que tienen once años.

No debería sorprendernos que Dios nos dé las maravillosas bendiciones de su gracia en medio del sufrimiento del que pedimos que nos librara. Él sabe perfectamente cómo otorgar su gracia para nuestro bien y para su gloria.


Devocional tomado del libro “Gracia Venidera”, páginas 66-67

Todos los derechos reservados ©2017 Soldados de Jesucristo y DesiringGod.org

Génesis 7 | Mateo 7 | Esdras 7 | Hechos 7

7 ENERO

Génesis 7 | Mateo 7 | Esdras 7 | Hechos 7

Esdras 7 cuenta la misión de Esdras en la comunidad posexílica de Jerusalén y Judá. Obviamente, era parte de la política imperial que si se permitía a los grupos de exiliados volver a su tierra, sus propios sacerdotes fuesen con ellos. Desde una perspectiva de superstición pagana, los gobernantes no querían que ninguno de los dioses de la región se enojasen con ellos (7:23); desde el punto de vista de la comunidad del pacto, era una formidable evidencia de que la mano de Dios estaba sobre ellos, capaz de gobernar los asuntos de los imperios más poderosos y de proteger a su propio pueblo.

La naturaleza de la tarea de Esdras podría entenderse fácilmente como un ejemplo de los privilegios y las responsabilidades de todos aquellos cuya obligación es enseñar la Palabra de Dios a su pueblo: “Esdras se había dedicado por completo a estudiar la ley del Señor, a ponerla en práctica y a enseñar sus preceptos y normas a los israelitas” (7:10).

(1) Esdras se dedicó al estudio de la ley. No existe una enseñanza de la Biblia efectiva a largo plazo si no va acompañada de largas horas de estudio continuo de la misma, a veces en solitario, con cansancio. Si usted no es un estudiante de la Palabra, no está llamado a ser maestro de la misma.

(2) Esdras se dedicó a la observancia de la ley. Para algunas personas, el estudio es un fin en sí mismo, o quizás un medio para el fin de la enseñanza. Sin embargo, aunque el tema central es la Escritura, estas personas no están comprometidas personalmente a vivir bajo sus preceptos, ordenar su matrimonio, finanzas, lenguaje, prioridades, valores, según la Palabra de Dios. No preguntan constantemente cómo desafían las Escrituras a los supuestos de su época y cultura, que todos nosotros adoptamos de forma inconsciente. Para tales personas, el estudio de la Biblia es una excelente disciplina intelectual, pero no una llamada persistente a la adoración; la Biblia debe dominarse como si de un libro de texto se tratase, pero no llama al pueblo de Dios a temblar; se deben amar sus verdades, pero se realiza en la presencia del Señor. Esdras evitó todas estas trampas y se entregó a observar lo que dicen las Escrituras.

(3) Esdras se dedicó a la enseñanza de la ley. No era un ermitaño, sino un pastor. Aprendió a transmitir lo que aprendió estudiando y obedeciendo. Se comprometió a enseñar la Palabra de Dios a su pueblo, fuese en grandes asambleas solemnes, en escenarios más familiares o en estudios individuales. Esdras se comprometió a enseñar la Palabra de Dios al pueblo de Dios. Es difícil imaginar un llamamiento más elevado.

Carson, D. A. (2014). Por amor a Dios: Devocional para apasionarnos por la Palabra. (L. Viegas, Trad.) (1a edición, Vol. II, p. 7). Barcelona: Publicaciones Andamio.

  Depravación Total (Parte 2)

Ligonier Espanol

  Depravación Total (Parte 2) – 8/12

 

Esta es la octava exposición del Dr. R.C. sproul en la serie de enseñanza: ¿Qué es la Teología Reformada? Todos somos pecadores. Pero, ¿qué tan pecaminosos somos? Además de nuestra corta vida y malos hábitos, ¿qué efecto real tuvo la caída en el pecador promedio? ¿Qué efecto tiene el pecado en nuestro proceso de toma de decisiones? ¿Qué poder usaste para elegir el evangelio? El Dr. Sproul nos lleva a las Escrituras para descubrir lo que Jesús tiene que decir acerca de nuestra capacidad de elegir mientras continúa explicando la «Depravación Total».

Ligonier es la confraternidad de enseñanza del Dr. R.C. Sproul. Nuestra misión, pasion y proposito es ayudar a las personas a crecer en su conocimiento de Dios y su santidad. En nuestra página web disponemos de una amplia variedad de recursos, tales como clases, guías de estudio, y contenido multimedia, con la finalidad de cumplir con nuestra misión de proclamar, enseñar y defender la santidad de Dios en toda su plenitud a tantas personas como sea posible.

Te invitamos a visitar nuestro sitio web, http://ligonier.es/

 

Atravesar la tempestad

(Dios) cambia la tempestad en sosiego, y se apaciguan sus ondas. Luego se alegran, porque se apaciguaron; y así los guía al puerto que deseaban.

Salmo 107:29-30

¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!

Marcos 6:50

Atravesar la tempestad

“Yo soy”, dijo Jesús a sus discípulos aterrorizados por un mar embravecido (Marcos 6:45-53). Luego dirigió la pequeña barca azotada por las olas y la condujo con seguridad “al puerto que deseaban”. El Señor todopoderoso que caminó sobre las olas sigue siendo el mismo para los que depositan su confianza en él. Muchas veces se habla de azar, de mala suerte, de imprevisto, pero el creyente sabe que el Señor gobierna las circunstancias de su vida, sean agradables o difíciles. Las dificultades pueden parecer insuperables, pero el Señor está por encima de todo.

Amigo cristiano, escuche su voz en medio de la tormenta: No temas, “yo soy”. Aquel que permite al mar levantarse enfurecido, también puede calmarlo, ordenándole: “¡Calla, enmudece!” (Marcos 4:39).

El Señor le dice: «Conozco cada una de tus pruebas; ninguna de ellas está ahí para hacerte naufragar, sino para acercarte más al cielo. ¿Tienes una enfermedad grave? ¿La soledad o el duelo te hacen llorar? Yo soy tu consolador, vine al mundo y pasé por todos los sufrimientos humanos. Permanece cerca de mí, en oración, pues siempre te escucho».

¡Miremos hacia arriba y recobremos el ánimo! Demos gracias al Señor por sus fieles cuidados, mientras esperamos estar un día junto a él en el cielo. Entonces comprenderemos el verdadero sentido de nuestras pruebas y alabaremos la bondad de Aquel que, en la tierra, nos acompañó mientras pasábamos por ellas.

Génesis 7-8 – Mateo 6:1-18 – Salmo 5:1-7 – Proverbios 2:6-9

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)
ediciones-biblicas.ch – labuena@semilla.ch