Rolando Otoniel (Otto) Sánchez Pérez, nació el 24 de febrero del año 1966 en la ciudad de Santo Domingo. Viene de un hogar cristiano y conoció la gracia de Jesucristo en su adolescencia.
Es pastor de la Iglesia Bautista Ozama desde el año 1992. Sus primeros estudios universitarios fueron en el área de Publicidad. Realizó estudios ministeriales en el Seminario Teológico Bautista Dominicano. Tiene una Maestría en Teología del Southern Baptist School for Theological Studies.
El pastor Otto está dirigiendo el STBD (Seminario Teológico Bautista Dominicano) desde enero del 2008. Está casado con Susana Almanzar y tienen dos niñas, Elizabeth Marie y Alicia.
Bienvenido a Iglesia Bautista Castellana. Mi nombre es Edgardo Piesco, actual pastor de la Iglesia Bautista Castellana y me siento muy honrado con su visita.
En cuanto a nuestra identidad, somos la primera iglesia evangélica establecida en Canadá contando con, 50 años de vida en el servicio a nuestra comunidad hispano-parlante. Nuestra congregación está constituida por inmigrantes provenientes de toda Latinoamérica. Oficiamos servicios en español y otros especiales en inglés para los jóvenes que dominan éste, como primera lengua. Nuestro objetivo primordial es hacer conocer el evangelio a nuestra comunidad en una actitud seria y de respeto por la dignidad humana.
Esta congregación se ha mantenido en una tradición de trabajo honesto, íntegro y procurando asistir a la sociedad. Nuestro enfoque es estrictamente bíblico; la predicación, expositiva; el objetivo de dicha predicación y enseñanza es que el pueblo conozca la Palabra de Dios sin especulaciones y/o manipulación de la misma, para la salvación del alma. Nuestra congregación promueve un ambiente familiar, proveyendo un equipo ministerial de ayudantes y colaboradores debidamente equipados para hacer placentera su visita a nuestros servicios.
Esperamos que disfrute su tiempo en nuestro medio, y que tengamos pronto el gran privilegio de gozarnos con su visita y cordial compañía. Hasta entonces, que la gracia y la paz de Dios y Su Hijo Jesucristo sea con usted y todos los suyos.
Salvador Gómez Dickson pertenece al Consejo de Pastores de Iglesia Bíblica del Señor Jesucristo, donde tiene la responsabilidad de exponer la Palabra de Dios cada domingo, además de impartir clases de Escuela Dominical. Es profesor de la Academia Ministerial Logos de IBSJ, donde ha impartido clases de Hermenéutica, Exégesis Bíblica, Griego, Doctrina del Hombre, de Cristo y de la Salvación, Introducción al Nuevo Testamento, entre otras. Está casado con Johanny Pérez y juntos tienen 4 hijos.
María… sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres… Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero solo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.
Ese día Marta recibió a Jesús en su casa y estaba muy atareada. Pero su hermana María estaba tranquila, sentada a los pies de Jesús, escuchando lo que él decía. Entonces Marta se indignó y dijo: “Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude” (Lucas 10:40). La respuesta de Jesús es digna de reflexión: “Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero solo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada” (v. 10:41-42).
El Señor no reprochó a Marta su trabajo, sino la preocupación y el tormento que este le ocasionaba. Su actividad la distraía y hacía que dejara de lado lo principal. María comprendió que, cuando Jesús habla, ¡la prioridad de las prioridades es escucharlo! Más tarde haría su trabajo, con su plena aprobación.
Este pasaje contiene un mensaje muy concreto. ¿Cómo escuchamos cuando Dios nos habla? ¿Le prestamos solo un oído distraído en medio de nuestras actividades? ¿Leemos la Biblia rápidamente, en medio del bullicio, o dejándonos distraer por los mensajes y alertas de nuestro teléfono? ¿Quién se atrevería a escuchar a su jefe solo con un oído, mientras hace otra cosa?
¡Nuestro Dios es digno de que lo escuchemos tranquila y atentamente! ¡Su mensaje es vital!
Tomémonos el tiempo para detenernos, sentarnos y cerrar la puerta al mundo tan exigente y agitado que nos rodea. ¡Esta es “la buena parte” que debemos buscar cada día, cueste lo que cueste!