Isha – Salmos

DÍA 128 – Salmo
Dosis: Protección
Los Nombres de Dios
“Los que viven al amparo del Altísimo encontrarán descanso a la sombra del Todopoderoso. Declaro lo siguiente acerca del Señor: Sólo él es mi refugio, mi lugar seguro.” (Salmo 91:1–2) (NTV)
Aunque no sabemos quién escribió este salmo, se le considera uno de los más populares del salterio. ¿La razón? La completa confianza que el salmista deposita en Dios. Dice Calvino: “Aunque muchos hablan de la providencia de Dios y dicen creer que Dios cuida a los suyos, pocos están dispuestos a dejar su seguridad completamente a él”. Debo aceptar que muchas veces tomo precauciones innecesarias porque no confío plenamente en Dios. Pero el salmista conocía tan bien a Dios que usa cuatro nombres que nos enseñan grandes verdades.
Altísimo (‘elyon). La raíz de esta palabra se usa para describir algo que está arriba o una persona en una posición prominente. En el caso de Dios, sugiere a un Dios que está por encima, y como él está arriba nos puede cuidar todo el tiempo. ¡Qué privilegio saber que podemos comunicarnos y confiar con reverencia en el que está por encima de todo y todos! Este nombre del Señor nos trae confianza.
Todopoderoso (shadai). Este nombre apunta al poder de Dios. En la raíz de esta palabra se implica la palabra “pecho”. Es decir, el Todopoderoso es quien nos suple, nos satisface y nos nutre, tal como una madre a su bebé. Es un Dios que ayuda y nos colma de todo tipo de bendiciones. Como él todo lo puede, nada está fuera de su alcance. Lo mismo puede darnos de comer que el vestido, o incluso nos puede sacar de todo peligro. Este nombre del Señor nos trae descanso.
Jehováh (yahveh). Los judíos temían tanto pronunciar este nombre que solo usaban las letras como siglas. El verbo, sin embargo, se deriva de “ser”. Esto declara que Dios es eterno. Pensemos en la reverencia y asombro que los judíos tenían ante Dios. ¿Y cómo usamos nosotros su nombre? Saber que Dios es asombroso, único y eterno nos debe hacer callar y arrodillarnos. No usemos el nombre del Señor en vano. El significado de este nombre del Señor nos produce reverencia.
Dios (‘elohim). El nombre de Dios está en forma plural pero se usa como un adjetivo o un verbo en singular. Conlleva la idea de fuerza y preeminencia. Esta palabra indica la idea la Trinidad. ¡Qué hermoso nombre para recordarnos que Dios nos libra vez tras vez de todo peligro! Este nombre nos trae paz.
Dice Spurgeon: “Tomar una verdad general y hacerla nuestra por fe personal es la más alta sabiduría”. Recordemos que podemos confiar en Dios y ocultarnos bajo sus alas. Creamos sus palabras: «Yo la libraré, porque ella se acoge a mí; la protegeré, porque reconoce mi nombre. Ella me invocará, y yo le responderé; estaré con ella en momentos de angustia; la libraré y la llenaré de honores. La colmaré con muchos años de vida y le haré gozar de mi salvación.» él nos puede y quiere cuidar, y descansemos en ello.
Oración: Señor, ayúdame a comprender la profundidad del significado de tus nombres para conocerte mejor y confiar más en ti. Amén.
De Vergara, P. A., de Vera, A. D., & Harris, K. O. (2012). Isha-Salmos: Una dosis diaria de fe para ti. (P. A. de Vergara, Ed.) (Primera Edición, p. 144). Lima, Perú: Ediciones Verbo Vivo.